Las vacaciones de verano son el mejor momento para dejar las pantallas a un lado y empezar a disfrutar del aire libre y de la familia, pero esto no siempre es fácil. ¿Cómo podemos reducir el tiempo que pasan los niños delante de la pantalla?

 

Establecer horarios

A veces no podemos prohibir de golpe algunas rutinas tecnológicas preestablecidas en nuestro día a día, así que una de las soluciones puede ser establecer una serie de horarios.

Los niños pasan de media unas 4 horas pegados a las pantallas, por lo que reducirlo a la mitad durante el verano, o dentro de una franja horaria, puede ser una buena opción.

Dar ejemplo

Lo más importante para que estos cambios se vean reflejados, es dar ejemplo como padres. Si decidimos que aparcamos la tablet o el móvil durante el tiempo de ocio, nosotros debemos también hacer un esfuerzo. ¡Será mucho más eficaz!

Tiempo en familia

Muchas veces los niños se lanzan a la tecnología por puro aburrimiento, ¿por qué no planeamos tiempo de calidad en familia? Podemos preguntarles qué les haría ilusión hacer todos juntos y darles la opción de decidir también algunos planes: excursiones, deportes, manualidades, etc…

Aunque también nos dicen los expertos en educación, que es importante que los niños se aburran de vez en cuando, ya que así desarrollan su imaginación.

Aplicaciones educativas.

Ya que vamos a dejarles usar la tecnología en momentos puntuales, lo mejor es que la usen con fines educativos. 

Una app de matemáticas en el iPad puede parecer muy aburrida de primeras, pero hay algunas con juegos de lógica, vocabulario, idiomas, etc… que son realmente muy atractivas para los peques de la casa. ¡y adaptadas por tramos de edad!

 

Y vosotros, ¿sois de limitar el uso de pantallas durante el verano?